lunes

Yo también quiero, me desilusiono, caigo, retrocedo, me hundo, sollozo, odio, envidio. Pero no me hace falta recordar al mundo cuán malo ha sido conmigo. No tengo la necesidad de llorarle al hombro de nadie, no tengo que lanzar indirectas al viento por si fuera hay alguien dispuesto a entenderlas, al fin y al cabo sólo hay una persona capaz de hacerlo. Los demás lo huelen, pero son ajenos, y cuando eres ajeno a algo es mejor que no te impliques, que te alejes y finjas ni haberlo visto. Normalmente quién más sangra es quien menos habla, el que necesita más fuerzas para seguir vivo.Soy igual de humana aunque me haya olvidado de llorar. Lo sé. Soy igual de patética aunque no lo deje notar. Soy igual de infantil, aunque ya no me como los mocos. Soy igual de cruel aunque me pare los pies.

No hay comentarios:

Publicar un comentario